La ULe alerta de que sin gestión preventiva los grandes incendios serán "incontrolables"

Expertos de la Universidad de León (ULe) han alertado este miércoles que sin una gestión activa y preventiva del territorio los incendios forestales más destructivos serán incontrolables.
EfeMartes, 26 de August de 2025
0

España se ha convertido en uno de los territorios europeos más afectados por los incendios forestales © UNIVERSIDAD DE LEÓN

La ola de incendios que en los últimos días ha azotado a León y a otras provincias del noroeste de España ha puesto de nuevo sobre la mesa la “vulnerabilidad de los ecosistemas y de las poblaciones ante unos fuegos cada vez más virulentos y de mayor extensión”, ha indicado este miércoles la institución académica en un comunicado.

Frente a este escenario, desde la ULe han recordado que el problema de los grandes incendios forestales no se resuelve con más medios de extinción, sino con una gestión preventiva y sostenida del territorio.

“Los incendios más destructivos no se apagan solo con recursos de emergencia. La verdadera clave está en la prevención“, ha expresado el doctor José Manuel Fernández Guisuraga, miembro del grupo de Ecología Aplicada y Teledetección de la ULe.

El doctor ha subrayado cómo España se ha convertido en uno de los territorios europeos más afectados por los incendios forestales, no simples conatos, sino grandes incendios capaces de arrasar miles de hectáreas en cuestión de horas y poner en riesgo no solo los recursos naturales, sino también pueblos enteros y la seguridad de las personas.

Fernández ha recordado que en los paisajes mediterráneos los incendios forman parte de la dinámica natural desde hace miles de años, y muchas especies de plantas dependen de él para regenerarse.

Sin embargo, ha advertido de que el problema actual radica en que el régimen de incendios, su frecuencia, intensidad o extensión, “ha superado los límites que los ecosistemas pueden soportar“.

Factores y soluciones

El investigador de la ULe identifica así tres factores principales detrás de la virulencia de los fuegos: el aumento de temperaturas y sequías asociado al cambio climático, la acumulación de biomasa tras el abandono de los usos tradicionales del medio rural y la meteorología extrema de los episodios de incendio.

“Donde antes había un paisaje mosaico con cultivos, praderas y pastos que interrumpían la continuidad de la vegetación, hoy encontramos grandes extensiones de matorral y arbolado denso que alimentan incendios incontrolables”, ha explicado el experto.

Fernández ha recalcado que gestionar el territorio de forma activa y sostenida es “esencial” para reducir la carga de combustible vegetal que alimenta los incendios.

Entre las medidas más eficaces, destaca la recuperación de los aprovechamientos agrícolas, ganaderos y forestales que durante siglos mantuvieron los paisajes en mosaico; promover el pastoreo extensivo; apostar por la selvicultura preventiva y abrir franjas de baja combustibilidad o cortafuegos verdes. A ello se suma, continúa, las quemas prescritas o controladas, una herramienta de gestión realizada en épocas de bajo riesgo bajo supervisión técnica.

Así, cuando un incendio alcanza una zona previamente gestionada con quema prescrita, su intensidad “se reduce drásticamente y aumenta la capacidad de los equipos de extinción para controlarlo”, ha apostillado Fernández Guisuraga.

0