¿Hablas conmigo... DECINE? con José Luis Alcaine, y la fotografía de Las delicias del Jardín
¿Quién dijo que las segundas partes nunca fueron buenas? Regresamos a ¿Hablas conmigo… DECINE? con la segunda parte de la entrevista José Luis Alcaine, director de fotografía y ganador de 5 Goyas. Junto a José María Aresté, director de DECINE21, se hablarán de la experiencia del rodaje de Las delicias del jardín, un rodaje poco habitual ya que fue rodada íntegramente con cámara de teléfonos móvil.
La integración del móvil
La película tiene un estilo similar a las comedias de Woody Allen, de forma realista y sencilla. José Luis Alcaine nos explica que la herramienta del móvil fue fundamental para ello, ya que se trata de una herramienta que facilita mucho la improvisación, era mucho más natural. No se le presta ninguna atención al teléfono. De igual forma, ara los actores esto también era una ventaja, ya que como ellos mismos comentaban no sentían la tensión de estar frente a una cámara, al igual que para grabar en ambientes público, el móvil pasa desapercibido.
Además el teléfono móvil presenta otra gran ventaja, y es que se puede colocar en cualquier sitio. El teléfono móvil puede ocultarse en cualquier sitio, hay momentos del rodaje donde el móvil se colocaba entre los libros de una estantería, dentro de una lavadora o pegado al propio techo. Al pesar tan poco es una ventaja para los cámaras, que pueden buscar la mejor posición sin tener que cansarse.
Seis décadas de trabajo
José Luis Alcaine ha tenido una carrera de más de seis décadas como director de fotografía, trabajando con diversos directores como Pilar Miró, Pedro Almodóvar, Chicho Ibáñez, entre otros. Menciona que no tiene un estilo definido debido a su falta de memoria, pero de esta forma, consigue que cada película que hace tiene un planteamiento y fotografía diferentes. De esta forma no se ve encasillado en un único estilo, sino que puede adecuarse a las necesidades de cada historia.
Como consejo a las nuevas generaciones de directores, fotógrafos y cineastas, resalta la importancia de tener una sólida cultura cinematográfica, especialmente del cine mudo, ya que considera que fue fundamental para el desarrollo del lenguaje visual en el cine clásico. Hay que tener en cuenta que los grandes directores de cine del del siglo 20, casi todos, están formados en el cine mudo, y eso es algo que se nota en su estilo.


