Educación unifica en un solo documento la información de evaluación para las familias
La orden regula el proceso de evaluación del aprendizaje del alumnado de Educación Infantil, Primaria, Secundaria Obligatoria y Bachillerato, ha detallado el departamento autonómico en un comunicado en que defiende que estas disposiciones responden a la necesidad de dar estabilidad al sistema de evaluación, evitando la dependencia de resoluciones anuales y garantizando una aplicación homogénea en todos los centros educativos. Uno de los aspectos más destacados es el reconocimiento de la autonomía de los centros para decidir sobre la evaluación y el sistema de calificación, poniendo en valor el criterio profesional del profesorado en la toma de decisiones.
Las órdenes establecen actuaciones comunes para las sesiones de evaluación, para garantizar coherencia entre todos los centros educativos, y concretan los momentos en que las familias deben recibir información sobre las calificaciones de sus hijos. La forma de hacer llegar la información a las familias se simplifica, tanto a lo largo del curso como al final. Esta información se facilitará mediante un único documento final, con el objetivo de reducir la burocracia y mejorar la claridad.
En cuanto a la coordinación entre etapas, se determina la información que debe trasladarse de cada alumno. Por ejemplo, en el paso de infantil a primaria se compartirán datos relevantes sobre lectoescritura, matemáticas y otros aspectos clave en este momento evolutivo. También fijan las normas para las reclamaciones, tanto por parte de las familias como de los centros, reforzando así la seguridad jurídica y garantizando una resolución adecuada de las discrepancias.