Síndrome postaborto infantil

Jesús Asensi
Profesor de Religión
16 de October de 2025
0

Tenía once años cuando recibió con inmenso gozo la noticia de que su madre esperaba un bebé. Pasaron los meses y una mañana encontró a su madre sentada en la cama con el semblante desencajado por la tristeza. Su padre había salido a por el coche para llevarla al hospital y él le preguntó a su mamá si el bebé se iba a morir. Ella lo miró con inmensa pena y asintió con la cabeza.

Estaban comiendo con sus abuelos cuando sonó el teléfono de casa. Era su padre que llamaba desde el hospital. El bebé, que había nacido con vida, había muerto al cabo de unos minutos. Y una alegría que alivió algo su desconsuelo fue que una monja que atendía el paritorio tuvo tiempo de bautizarlo.

Esa tarde de sábado se fue a jugar al colegio con unos amigos y aprovechó la poca iluminación que había en una de las aceras del trayecto para llorar en silencio por la pérdida de su hermanito.

0
Comentarios