La charla comienza con una confesión personal: “Yo soy tradicional”, admite Mayte Santos, jefa del Área de Desarrollo Profesional de Fundación Ibercaja, al hablar de su preferencia por el libro físico frente a la pantalla. No lo expresa como rechazo a lo digital, sino como la necesidad de matizar un debate que a menudo se vive en términos radicales. “Hay que buscar el equilibrio”, resume, frente a una discusión que con frecuencia resulta “un poco bronca”.









